La red tranviaria urbana de Milán consta de 17 líneas que atraviesan la ciudad y una última que conecta la metrópoli con la ciudad satélite de Limbiate, en vía remodelación debido a la Expo 2015. (En septiembre de este año se ha suprimido la línea interurbana que conectaba la gran ciudad con mi municipio de nacimiento, la Milano-Desio). Esta red de la que estamos hablando consta de nada mas y nada menos que de 160km de longitud, la segunda en Italia después de la de Torino (220km).
Anteriormente al uso de tranvías (en en interior de la ciudad estaba prohibidas la colocación de vías y el uso de vehículos a vapor) y hasta el 1880 circulaban los llamados "Omnibus" es decir carrozas públicas de tracción animal sobre raíles que funcionaban como autobuses rudimentarios. Pero en 1884, debido a la gran demanda por parte de la población, a la inminente llegada de la exposición nacional y después de numerosas discusiones, las líneas férreas del tranvía ya cruzaban las calles de Milano. La plaza del Duomo se convirtió así en un carrusel de transportes públicos con cinco líneas de tranvía y diez líneas de vehículos de caballo. En el mismo periodo se completo la línea de circunvalación y las once las líneas radiales hacia el corazón de la ciudad.
Durante el segundo conflicto mundial, las 37 líneas de transporte urbano fueron notablemente afectadas por los bombardeos anglo-americanos y fueron centenares los vehículos destruidos (además una treintena fueron secuestrados por el ejército alemán para llevarlas a Múnich para substituir sus tranvías); pero por suerte fue posible reconstruir un gran número de las cabinas modelo “1928” (que aún se utilizan) gracias a su estructura de acero.
Tranvías de la serie 1928 en la actualidad
**A fecha del 7 de Octubre de 2011, el municipio de Milán ha restaurado y recuperado 50 vehículos de los años setenta, basándose en el principio del “revamping” y con una inversión de 50 millones de euros se han recuperado para el uso 51 tranvías, en un claro ejemplo de reciclaje de recursos públicos ya que cada tranvía moderno tiene un coste de 2.5 millones de euros.