En este nuevo post hablaré sobre la movilidad que concierne a Calella, que dividiré en dos categorías: la externa y la interna.
El ferrocarril es el transporte público de mayor importancia de la localidad y el más usado. Une la ciudad con Barcelona y su aeropuerto, Girona y la Costa Brava con una frecuencia mínima de un tren por hora en cada dirección (en verano se aumenta)
El resto de transporte público con carácter externo se reduce a las diferentes líneas de autobús que salen de Barcelona desde el aeropuerto, la estación de Sants o la Plaza Catalunya. Desde Girona y el aeropuerto también hay diversas líneas de autobús que hacen parada en Calella. De esta manera podemos decir que la ciudad queda conectada con las ciudades de mayor importancia y sus aeropuertos con el fin de fomentar el turismo.
En cuanto a la movilidad interna tenemos tres situaciones muy claras. El transporte privado, el autobús público y a pie. Ésta última es la manera más frecuente de moverse por la ciudad aunque sea de una punta a otra ya que no se tarda más de media hora en este recorrido. El autobús es una línea interna de conexión intermunicipal entre Calella y Pineda de mar. Por último el transporte privado circula sobre todo por la N-II que discurre por toda la ciudad. El coche ha intentado ser apartado de las calles de la ciudad para potenciar la peatonalización. De esta manera, longitudinalmente sólo podemos atravesar Calella por la calle paralela a la línea del tren, por eso se usa tanto la carretera N-II. Según las encuestas el 70% de la movilidad de la N-II la general el propio municipio y el 15% son trayectos de paso entre municipios vecinos.
Si analizamos el uso del vehículo privado en esta carretera nacional podemos ver que la mayoría de los viajes se llevan a cabo con motivos de gestiones o trabajo. En el caso de las gestiones no se puede reconducir este uso hacia el transporte público ya que son viajes cortos donde el coche es el medio más competitivo. Los viajes de trabajo se pueden ir trasladando hacia el transporte público pero el tren no siempre puede llevar al usuario a todas las destinaciones que éste requiere.