Comparación centro histórico
Me dispongo a comparar los centros históricos de Barcelona y mi municipio de estudio. Estructuraré la comparación en 3 aspectos clave que pretende dar una nueva visión.
El origen de los dos casos es muy distinto. Por un lado se trata de un origen de un campamento romano de planta regular, construido a la vez, amurallado, (con perímetro definido) sobre una colina.
Por el otro se trata de un inicio en época muy distinta. Es cierto que las primeras edificaciones son de época romana, al pie de la variante de la Vía Augusta, pero el casco antiguo de Vilassar de Mar tiene su origen el sXV con la construcción de 3 masías de 3 familias adineradas de la zona, a las que se le fueron añadiendo otras viviendas para pescadores y agricultores. Por lo tanto, un inicio a base de ir acoplando edificaciones a medida que las actividades económicas atraían habitantes.
La estructura del centro histórico de la ciudad de condal tiene 3 niveles, el romano (con estructura octogonal sobre la colina, con calles bastante ortogonales debido al origen militar) el gótico arcaico y la ampliación más allá de la rambla. Esta ciudad gótica, con calles estrechas y de trazo quebradizo tiene una gran densidad, poca luz y ventilación.
Vilassar de Mar presenta una estructura regular que responde a la lógica de la orografía, con las calles principales sin pendiente (donde se apoyan las viviendas adosadas) y las secundarias por dónde circulan los torrentes.
Así que se distingue una gran diferencia de densidad, estructura urbana y tipología edificatoria que construyen modelos de ciudad muy distintos.
En la actualidad, el casco antiguo de Barcelona ha sufrido una gran transformación. A base de distintas y numerosas actuaciones en los últimos siglos se han abierto espacios públicos (derribo de casas, conventos...), se han situado grandes equipamientos y centros culturales y educativos para atraer la actividad. Presentan todavía problemas como movilidad, viviendas obsoletas y insalubres por resolver.
Vilassar de Mar ha realizado actuaciones, de manera mucho más modesta, para responder a las nuevas necesidades de la ciudad. Se han conseguido espacios libres derribando edificaciones y así consiguiendo numerosas plazas. Se ha pacificado (peatonalización) y dotado de los servicios (como aparcamiento subterráneo y sistema de recogida de basura subterráneo) en toda la zona para favorecer el comercio de proximidad y garantizar las condiciones de las viviendas de la zona. Se ha recuperado también alguna antigua vivienda para su uso como equipamiento para la población.
Con todas estas actuaciones se consigue una adaptación al modelo urbano histórico, con actividades económicas y características sociales ya pasadas.
El origen de los dos casos es muy distinto. Por un lado se trata de un origen de un campamento romano de planta regular, construido a la vez, amurallado, (con perímetro definido) sobre una colina.
Por el otro se trata de un inicio en época muy distinta. Es cierto que las primeras edificaciones son de época romana, al pie de la variante de la Vía Augusta, pero el casco antiguo de Vilassar de Mar tiene su origen el sXV con la construcción de 3 masías de 3 familias adineradas de la zona, a las que se le fueron añadiendo otras viviendas para pescadores y agricultores. Por lo tanto, un inicio a base de ir acoplando edificaciones a medida que las actividades económicas atraían habitantes.
La estructura del centro histórico de la ciudad de condal tiene 3 niveles, el romano (con estructura octogonal sobre la colina, con calles bastante ortogonales debido al origen militar) el gótico arcaico y la ampliación más allá de la rambla. Esta ciudad gótica, con calles estrechas y de trazo quebradizo tiene una gran densidad, poca luz y ventilación.
Vilassar de Mar presenta una estructura regular que responde a la lógica de la orografía, con las calles principales sin pendiente (donde se apoyan las viviendas adosadas) y las secundarias por dónde circulan los torrentes.
Así que se distingue una gran diferencia de densidad, estructura urbana y tipología edificatoria que construyen modelos de ciudad muy distintos.
En la actualidad, el casco antiguo de Barcelona ha sufrido una gran transformación. A base de distintas y numerosas actuaciones en los últimos siglos se han abierto espacios públicos (derribo de casas, conventos...), se han situado grandes equipamientos y centros culturales y educativos para atraer la actividad. Presentan todavía problemas como movilidad, viviendas obsoletas y insalubres por resolver.
Vilassar de Mar ha realizado actuaciones, de manera mucho más modesta, para responder a las nuevas necesidades de la ciudad. Se han conseguido espacios libres derribando edificaciones y así consiguiendo numerosas plazas. Se ha pacificado (peatonalización) y dotado de los servicios (como aparcamiento subterráneo y sistema de recogida de basura subterráneo) en toda la zona para favorecer el comercio de proximidad y garantizar las condiciones de las viviendas de la zona. Se ha recuperado también alguna antigua vivienda para su uso como equipamiento para la población.
Con todas estas actuaciones se consigue una adaptación al modelo urbano histórico, con actividades económicas y características sociales ya pasadas.
